La danza del "Diablo" en Tecomaxtlahuaca, a pesar de haber surgido como un personaje secundario en la danza de "Santiagos, Moros y Cristianos," ha arraigado profundamente en la población local. Este personaje es percibido como una figura fantástica que aparece durante la batalla para recolectar las almas de los moros que no se convierten al cristianismo.
La intervención del "Diablo" se produce en el tercer acto de la danza cuando es invocado por el Apóstol Santiago para advertir sobre el destino de aquellos que se oponen a la doctrina cristiana.
A pesar de sus breves intervenciones en la trama principal de la danza de "Santiagos, Moros y Cristianos," la elegancia de su vestimenta y la alegría de su actuación llevaron a que la danza del "Diablo" se desprendiera de la danza principal. Con el tiempo, se popularizó la práctica de vestirse de "Diablo" y retar a "Mahoma" en el tradicional encuentro de "los Golpes." Esto generó ciertas controversias y pérdidas de máscaras debido a empujones y caídas, lo que llevó a la eliminación temporal de este elemento en la danza.